El Registro Civil de Málaga ya cuenta con una máquina electrónica expendedora de tiques después de que se rompiera la primera hace poco más de dos años, en marzo de 2012. Juan Antonio Luque, de STAJ, asegura que este aparato "beneficiará tanto a los ciudadanos como a los funcionarios". Pero Luque tuvo duras palabras para la Junta por haber tardado un bienio en instalar el aparato: "Han tenido que pasar dos años y mil y una quejas y peticiones, una empresa en concurso y por fin una simple decisión de la Junta".
La rotura de aquel aparato provocó conflictos entre los ciudadanos que aguardaban la cola para realizar los distintos trámites en la oficina y enfados de éstos con los funcionarios que tenían que atenderlos.
Desde STAJ se insistió en que este gasto, ya que la máquina es de una nueva empresa, "es un motivo más para exigir la permanencia de esta oficina en la Administración de Justicia". Añadió que sería una buena idea reimplantar la jornada de tarde en el servicio, ya que ésta dio "muy buenos resultados".
