Miles de personas de la llamada "marea amarilla" procedentes de toda España se manifestaron ayer sábado en Madrid para protestar contra la privatización del Registro Civil e impedir que la labor de los registros se derive a los registradores mercantiles y de la propiedad. La manifestación partió de la Plaza de Cibeles y concluyó frente al Ministerio de Justicia, donde exigieron que la función de los registros siga siendo pública.
Los funcionarios hemos dejado claro que no aceptamos la privatización de un servicio público que se viene prestando por los funcionarios de Justicia desde hace 144 años de forma gratuita, a pesar de la insuficiencia de medios con que cuentan los Registros Civiles para desarrollar su trabajo con eficacia.
STAJ, que participó en la multitudinaria manifestación, sigue abogando por un Registro Civil público, gratuito y dentro de la Administración de Justicia, y por ello exigimos no sólo la paralización del proyecto de privatización, sino también la derogación de la Ley de 2011, para que el Registro Civil permanezca como un servicio público dentro de la Administración de Justicia.
Los funcionarios hemos dejado claro que no aceptamos la privatización de un servicio público que se viene prestando por los funcionarios de Justicia desde hace 144 años de forma gratuita, a pesar de la insuficiencia de medios con que cuentan los Registros Civiles para desarrollar su trabajo con eficacia.
STAJ, que participó en la multitudinaria manifestación, sigue abogando por un Registro Civil público, gratuito y dentro de la Administración de Justicia, y por ello exigimos no sólo la paralización del proyecto de privatización, sino también la derogación de la Ley de 2011, para que el Registro Civil permanezca como un servicio público dentro de la Administración de Justicia.