"Es imposible", explican, y reprochan a Justicia que no solicitara antes (no lo hizo hasta el 4 de abril e insistió con una nueva circular el 11 de abril) la actualización diaria de fallecidos. También le afean que no pusiera personal adicional en los Registros Civiles y los Juzgados de Paz (436 y 7.767 dispersos por toda España) para realizar tal recuento. A su juicio, estos son los principales "errores" que impiden contabilizar el número real de fallecidos en España por la enfermedad.
"Estamos absolutamente desbordados. Con la cantidad de muertes que hubo las primeras semanas, incluso se entregaron licencias de enterramiento sin hacer la inscripción inmediata en los registros, dejando esa labor para más adelante porque no damos abasto", expone un representante del STAJ, quien también aclara que a pesar de las limitaciones, la mayoría de Registros enviaron la información requerida por Justicia.