La Fiscalía advierte en su Memoria correspondiente a 2012 de que la agenda de los Juzgados de lo Social, encargados de tramitar las demandas por despido, está "desbordada a años vista", y admite que los fiscales no pueden asistir a todas las vistas en las que es preceptiva su presencia.
Este es el caso de los procesos de despido en los que se haya invocado la vulneración de derechos fundamentales, cuyo número ha aumentado "considerablemente" debido a la crisis económica. "Ello se ve sin duda cualificado por el matiz jurídico que se deriva del hecho de que de progresar tal invocación se declararía la nulidad del despido y el afectado podría acceder a una resolución de nulidad que propicie la conservación del puesto de trabajo", señala la Memoria.