Este martes se activaba la segunda fase del plan de desescalada en la Administración de Justicia valenciana. La noche anterior, a la hora de cenar, muchos funcionarios no sabían todavia a qué hora debían entrar a trabajar al día siguiente. No fue hasta las nueve y media de la noche cuando el departamento que dirige Gabriela Bravo emitió las instrucciones a aplicar a partir de la mañana siguiente.
STAJ ha criticado la falta de planificación. "La Dirección General de Justicia ya nos tiene acostumbrados a hacer las cosas tarde y mal, siendo siempre necesaria una catástrofe para hacerla reaccionar", ha lamentado.
A este respecto, ha recordado que "ya pasó" con el incendio de la Ciudad de la Justicia. "También volvió a suceder con la muerte de una persona por infarto a la que no se le pudo realizar la reanimación al no funcionar los desfibriladores".
A estas circunstancias, STAJ ha agregado los "tumbos" de Justicia en el área de personal y el expediente digital "en pañales". Con esto, "no nos es de extrañar que pocas horas antes de acostarse, los funcionarios de Justicia ignorase a qué hora entraban a trabajar al día siguiente".