La reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, a la que hemos tenido acceso, plantea el retroceso en más de 30 años en materia de derechos. Todos los sindicatos nos hemos manifestado en contra de esta reforma que se hace por la puerta de atrás, a hurtadillas, vulnerando el derecho a la negociación colectiva, ya que de lo que estamos hablando es de una modificación sustancial de condiciones de trabajo de los funcionarios públicos.
Es una provocación en toda regla a nuestro colectivo, ya que no supone ahorro económico alguno. Sí supone la mayor supresión de derechos jamás vivida y deja "en nada" varios años de movilizaciones, huelgas incluídas.
Esta reforma express planeada por nuestro inefable ministro, parece ser que no va tan rápida como le gustaría, no tuvo en cuenta que también afecta a Jueces, Fiscales y Secretarios y que naturalmente estos colectivos han mostrado como nosotros su oposición a la pérdida de derechos que supone.