Dice el chascarrillo popular que los senadores no suelen creer en que despues de esta haya una vida mejor: ellos ya viven en el cielo. Y algo hay de verdad en el cruel aforismo. Es el caso de decenas de parlamentarios españoles, que al compaginar la política nacional con la autonómica o local perciben al menos dos sueldos públicos.
A ninguno de ellos les afecta la entrada en vigor, el pasado 1 de agosto, de la incompatibilidad de sueldos decretada por el Gobierno el 13 de julio. Esta medida prohíbe cobrar la indemnización por dejar de ocupar un alto cargo a los políticos que tengan otros ingresos, pero nada dice de los que cuentan con dos o más sueldos del erario.
Lo único que está prohibido es ser a la vez diputado en el Congreso y senador o diputado regional y nacional. De ahí que en la Cámara Alta abunden los alcaldes, concejales, consejeros de cabildos, diputados provinciales y diputados regionales.