Fue el anuncio estrella de Montoro en el debate de Presupuestos celebrado el miércoles en el Congreso de los Diputados: los funcionarios recibirán, a partir de enero de 2015, el 25% de la paga extra de Navidad que el Gobierno eliminó en julio de 2012. La medida, sin embargo, tiene una serie de matices que no han pasado desapercibidos.
La devolución de esa parte de la paga extra solo beneficiará, en un principio, a los funcionarios de la Administración General del Estado. Los empleados de las administraciones autonómicas, por tanto, "dependerán del Gobierno local de turno".
En ese sentido, desde Hacienda reconocen que ni la Comunidad Valenciana ni Cataluña tienen intención, a día de hoy, de devolver ese 25% de la paga extra de Navidad eliminada por el Gobierno central en 2012.
Esa postura de los ejecutivos autonómicos afectará a grandes sectores de la función pública. Es una medida más electoral que práctica, ya que muchos se quedarán sin ese dinero. No obstante, la media del dinero que recibirá cada funcionario es de 250 euros, por lo que el gasto del Ministerio "no es tan elevado".