El Ministro de Justicia se ha comprometido en el Senado a "sustituir el concepto" de juicios rápidos por el de agilidad general en el funcionamiento de toda la Justicia española. La idea de juicios rápidos, ha señalado el ministro, "al final lo que viene a hacer es un reconocimiento, casi con resignación, de la lentitud de nuestra Justicia". Gallardon ha prometido, en cambio, buscar la agilidad en todos los órdenes jurisdiccionales a través de una reforma "sin precedentes" y ambiciosa.
En una pregunta al ministro, el senador Díaz Tejera ha preguntado en concreto sobre la oficina judicial, y el ministro ha respondido que se trata de "una gran idea pésimamente ejecutada".
La idea de una nueva oficina judicial nació durante el mandato del expresidente del Gobierno popular José María Aznar, pero ha sido mal desarrollada por el Gobierno socialista siguiente, que malgastó "millones y millones de euros" en, por ejemplo, "sistemas informáticos que no se entienden entre sí", ha dicho el ministro. "En tiempos de bonanza" no supieron dar las respuestas adecuadas, ha acusado Gallardón antes de anunciar que el actual Gobierno las dará con sentido común, trabajo y menos gasto.