Decía el aristócrata y militar francés, La Rochefoucauld, que "sin voluntad, sin método y sin orden no es posible ni el éxito ni el triunfo". Esto es precisamente lo que las Juntas de Jueces de Valencia, Sevilla, Málaga o Madrid piensan del "Plan de Urgencia" del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sobre los Juzgados Provinciales bises que a partir del 1 de junio tendrían que comenzar a funcionar para hacer frente a la avalancha que se avecina de demandas de cláusulas suelo, vencimiento anticipado, intereses moratorios, gastos de formalización de hipoteca o hipotecas multidivisa. Porque en la implementación de estos 54 Juzgados Provinciales no ha habido ni voluntad, ni método ni orden. Así lo ven los jueces consultados.
Un plan que, además, pone al frente de la mayoría de esos órganos a jueces en prácticas. Los conejillos de indias son los 65 novatos de la 67 Promoción, que tendrán que ponerse al frente de cada uno de esos juzgados.
Las Comunidades Autónomas de Andalucía, Valencia y Cataluña ya han dejado claro que no apoyarán el plan. Galicia y el País Vasco consideran que no es necesario, al menos hasta que se constate la supuesta "avalancha".
Entre los jueces decanos el malestar está muy extendido, por la ausencia de diálogo y la forma por como se ha impuesto el "Plan de Urgencia", sin explorar otros medios alternativos. Desde STAJ, a través de su portavoz Abilio García Francisco, se ha puesto de manifesto el temor ante la posibilidad de bloqueo de los juzgados, ya que no hay "nada", "ni una silla, ni un ordenador, ni un local" (escucha audio AQUI).