Según STAJ, a esta funcionaria se le asignan en la práctica "funciones que en realidad corresponden al Cuerpo superior, pero ahora cuando pide que se le permita ocupar dicho puesto y percibir unas retribuciones ligeramente mejores, se le deniega, con fundamento únicamente en que tiene concedida una reducción de jornada".
Para STAJ, esta actuación por parte de la Administración "impide a la funcionaria mejorar económica y profesionalmente, constituye una discriminación intolerable, vulnera los derechos de la funcionaria como mujer y como madre trabajadora, y es contraria a los principios de conciliación de la vida familiar y laboral, máxime cuando la reducción de jornada tiene fundamento en el cuidado de un hijo con discapacidad, y que se le aplica con detracción proporcional de su sueldo".
STAJ concluye señalando que "la discriminación por ser mujer" resulta "lamentable", pero "por ser madre es simplemente escandaloso", y "la Junta de Andalucía debe rectificar de inmediato".
