Las funcionarias del Estado gozarán de permisos retribuídos desde la semana 37 de gestación y hasta el día del parto a partir del año que viene, tal y como ha anunciado este miércoles el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso, Beteta ha señalado que una "inclusión importante y novedosa" en las cuentas del año que viene es este nuevo permiso retribuído, que beneficiará a las empleadas públicas en el "último periodo del embarazo, que suele ser el más complicado".
Por otra parte, el Ministerio de Hacienda ya anunció el acuerdo alcanzado con las centrales sindicales para "poner fin a la congelación salarial" que ha afectado a los funcionarios en los últimos cinco años mediante una subida de sus retribuciones del 1% "en consonancia con las mejoras económicas".
En este sentido, Beteta ha cifrado en 180 millones de euros el coste de esta decisión para el Estado y de 883 millones de euros para todas las administraciones públicas, ya que esta decisión de aumento salarial es "normativa básica y de obligado cumplimiento" para todos los niveles de la Administración.