Ayer en el Ministerio de Hacienda, hoy en el Congreso, las concentraciones y actos de protesta se extienden por toda España con miles de trabajadores indignados, lo que unido a la práctica paralización de la actividad en los centros de trabajo tiene que obligar a esta administración a efectuar una inmediata propuesta e iniciar las negociaciones con el comité de huelga.
Es ya indecente e inexplicable para la opinión pública que el Ministerio de Justicia siga sin sentarse a negociar en lo que es ya un verdadero conflicto social de incalculables consecuencias. Ya son millones de personas las que se están viendo afectadas en la práctica paralización de sus asuntos judiciales y del registro civil, por la actitud intransigente, soberbia y clasista de Pilar Llop, que solo atiende las reclamaciones del personal de los cuerpos de mayor titulación, ignorando y despreciando al resto.