La Junta de Andalucía tiene un organismo, el Instituto Andaluz de Administración Pública, cuya misión es la formación continua de sus funcionarios. Solo a cursos y este tipo de actividades dedicará más de dos millones de euros en 2014, según consta en los presupuestos. Pues a pesar de tener un organismo dedicado a estas funciones y destinar ese presupuesto, el Gobierno andaluz paga también a los sindicatos para formar a sus empleados públicos.
Lo denunciaba el STAJ, que ha presentado una petición ante la Junta para que se supriman todas las subvenciones que reciben los sindicatos en materia de formación en Andalucía.
"Se comprende mal que en el escenario que nos encontramos, cualquier sindicato, más grande o más pequeño, de clase o corporativo o profesional, continúe recibiendo dinero público que sale del bolsillo de todos los contribuyentes para algo que puede y debe hacer la administración por sí misma", señaló el coordinador de STAJ Andalucía, Nicolás Núñez.