La primera juez que en España fue, Maria Jover Carrión, fue homenajeada por más de cien compañeros de la carrera y del mundo judicial al llegar a su jubilación. Ha apurado su vida laboral hasta el máximo, pues esta magistrada de 70 años no está segura de guardar aún energía y vitalidad suficiente para seguir. "Podía haber seguido un par de años como juez de adscripción, pero creo que este es el momento para dejarlo", dice. Y la ley es la ley.
Bien lo sabe ella, que se ha pasado la vida aplicándola e interpretándola desde que en 1972 ganó la plaza de juez comarcal en Fraga (Huesca). Después pasó por San Clemente (Cuenca), Cartagena, Linares (Jaén), Caravaca de la Cruz (Murcia), y por Gerona, ya como magistrada en el 83. De allí saltó en cuanto pudo y le tocó el turno a su querida ciudad natal, Murcia, en 1990, y después empezó a presidir la Sección Tercera de la Audiencia Provincial. Hasta la fecha.