Los funcionarios tendrán que esperar para recibir el dinero que les corresponde de los 44 días a los que tienen derecho a cobrar de la extra de Navidad suprimida el año pasado. Ya existen sentencias a favor de los recursos presentados por los funcionarios, al aceptar que el derecho a cobro de esa extra suprimida por el Gobierno empezaba el 1 de junio el año anterior y la medida no entró en vigor hasta el 4 de julio, por lo que a los demandantes les correspondería el abono de esos 44 días.
La idea de Antonio Beteta, secretario de Estado de Administraciones Públicas, es retrasar el pago de ese dinero a todos los funcionarios de la Administración hasta 2015 para, de esta manera, no comprometer los presupuestos aprobados para este año ni los del año próximo, último de la recesión según los cálculos del Gobierno.
El secretario de Estado, además, no pagará los 250 euros de media a los que tiene derecho cada empleado público en una nómina, sino a través del abono de esa cantidad en el fondo de pensiones que le corresponde a cada funcionario.