El aumento de tasas judiciales (ver cuadro) ha sido el argumento principal del debate de aprobación del los Presupuestos para Justicia 2012 ayer en el Congreso de los Diputados, junto con la no convocatoria de plazas de jueces este año. Una subida de tasas desde luego polémica que busca no sólo ingresar dinero al Estado, sino persuadir de acudir a los tribunales como medio “espontáneo” ante un litigio. No en vano se está promocionando como nunca la mediación como modo de resolución de conflictos.
En su comparecencia durante el debate plenario, el responsable de Justicia ha solicitado la confianza del arco parlamentario a las cuentas de su departamento, que alcanzan los 1.574 millones de euros sufriendo una rebaja del 6,3 por ciento, y están basadas en la gestión "más eficaz y eficiente" de los recursos públicos.
Gallardón ha defendido la revisión de las tasas judiciales en la segunda instancia, cuyos beneficios irán destinados a "garantizar la sostenibilidad" del sistema de Justicia Gratuita máxime en este momento de crisis económica y social. El ministro ha aprovechado para solicitar "un esfuerzo razonable" a quienes "más directamente se benefician" de la acción de los tribunales. Asimismo, ha insistido en que este ejercicio no se convocarán oposiciones a jueces y fiscales.