Carlos Carnicer, presidente del Consejo General de la Abogacía Española, ha afirmado que si lo que perseguía el Ministerio con la Ley de Tasas era acabar con un uso abusivo de la Justicia existen otras vías que podrían obtener los mismos fines con diferentes medios. Puso como ejemplo la posibilidad de que, después de un procedimiento, se celebre una vistilla para comprobar si ha habido abuso o no y, en caso de que, efectivamente, se detecte temeridad o mala fe, que sean las personas que han hecho ese mal uso quienes paguen.
La cuestión de las tasas judiciales ha sido el tema que mayor y más duros enfrentamientos ha provocado entre el colectivo de los abogados y el Ministerio de Justicia, una relación tensa que, no obstante, parece haber abierto ahora una nueva vía de negociación. Pese a los últimos acercamientos de Justicia, Carnicer ha señalado que Gallardón no ha sido un buen ministro y ha enfatizado en que "no es cierto que todos los profesionales estén contra él, es el ministro el que está contra todos los profesionales".