Los fallos técnicos, la inadaptación tecnológica de usuarios y administración o la duplicidad de documentación en digital-papel, han sido hasta el momento las quejas habituales que han llevado a colegios de abogados de distintas comunidades autónomas a pedir el aplazamiento, e incluso suspensión, del nuevo sistema digital de gestión de documentación jurídica. Sin embargo, para Javier de la Cueva, abogado especializado en Tecnología y experto en propiedad intelectual, "que el sistema funcione bien o mal, es anecdótico; el problema de Lexnet reside en la arquitectura".
Una arquitectura tecnológica que estaría poniendo en peligro no uno sino cuatro principios del derecho constitucional "al atentar contra la separación de poderes, la independencia del poder judicial, la independencia de la abogacía y la privacidad de los clientes de los abogados".
De la Cueva advierte de que lo que se ha hecho con Lexnet es "darle al poder ejecutivo, la gestión de toda la información de los pleitos que hay en España", lo que supone "un atentado en la línea de flotación de la separación de poderes".