Los 17 presidentes de los Tribunales Superiores de Justicia (TSJ) de España, reunidos en Albacete entre el 2 y el 5 de octubre de 2012, han puesto de manifiesto su intención de buscar puntos de consenso en torno a iniciativas que permitan avanzar en una justicia de calidad garantizando la independencia del Poder Judicial.
Según un comunicado emitido al término de esta convocatoria, los presidentes piden soluciones a las carencias estructurales, organizativas y presupuestarias que presenta la Administración de Justicia, situación que consideran agravada "por una completa paralización de las inversiones". Además, "exigen" que los órganos del gobierno del Poder Judicial tengan "autonomía en el gasto" para que puedan adoptar medidas de refuerzo en los órganos judiciales.
Reclaman de forma "urgente" la modernización tecnológica de la justicia, que pasa por la incorporación del expediente digital y una plataforma común de comunicación telemática en todos los órganos judiciales españoles. En cuanto a la futura demarcación y planta judicial, abogan por una redistribución más racional de los órganos judiciales. Un nuevo modelo organizativo, dicen los presidentes de los TSJ, que debe hacerse “de manera realista“, sin olvidar las peculiaridades y características de cada territorio.