STAJ ha presentado una denuncia ante la Inspección de Trabajo por los fuertes olores emanados desde el Instituto de Medicina Legal (IML), con instalaciones en la Ciudad de la Justicia de Almería. STAJ asegura que las labores forenses requieren de productos que desprenden fuertes olores y éstos se filtran a todo el edificio.
Por ello, STAJ solicita a la Inspección de Trabajo que analice el origen y determine si los gases pueden producir potencialmente algún problema de salud para funcionarios y ciudadanos que cada día acuden a la sede de los juzgados almerienses.