Decenas de trabajadores de los juzgados de Llíria se han concentrado ayer a las puertas del palacio de Justicia en señal de protesta por el continuo colapso informático que, según ha denunciado STAJ, se produce por la implantación de la nueva oficina judicial.
El portavoz del sindicato, Luis García, ha explicado que "desde hace unos meses la Dirección General de Justicia viene cambiando los programas informáticos para adecuarlos a la nueva oficina, pero el proceso está siendo un quebradero de cabeza para funcionarios, profesionales y los ciudadanos en general por el bloqueo permanente de los ordenadores".
Según STAJ, estos problemas se dan en todos los partidos judiciales en los que se están instalando los nuevos programas, con bloqueos continuos, y han citado concretamente los de Carlet o Gandía.
"Los funcionarios se desesperan, su trabajo se pierde o no avanza, mientras se les exige productividad. Esto provoca impotencia y ansiedad, ante la desidia de la Administración, que sigue escudándose en que son cosas puntuales", ha explicado el responsable de STAJ.