Los juzgados civiles de Cantabria recibieron un total de 419 demandas de disolución matrimonial, entre separaciones y divorcios, durante el segundo trimestre de este año, lo que representa una disminución del 2,1% respecto al mismo período de 2015.
En los tres meses analizados, los órganos judiciales de Cantabria con competencia en familia -exclusivos o no- registraron, además, 154 peticiones de modificación de medidas acordadas en sentencia; y 120 procedimientos para la fijación de medidas de guarda y custodia sobre hijos nacidos en parejas no casadas y que se han disuelto.
Por otro lado, durante el segundo trimestre de 2016 no se registró ningún procedimiento de nulidad matrimonial en Cantabria.