Cuando llegó la ministra, pidieron hablar con ella para hacerle entrega en mano de una carta con nuestras reivindicaciones. La ministra se negó a hablar con los allí concentrados, pero viendo que no cesaban en los abucheos y continuaban con las pancartas, envió a hablar con los delegados al secretario de Estado de Justicia, Tontxu Rodríguez.
Lo primero que dijo el secretario de Estado es que éramos funcionarios transferidos y la competencia en materia salarial era de las comunidades autónomas, a lo que se le contestó que somos Cuerpos nacionales y que claramente sabían que nuestra reclamación salarial es una subida en nuestro complemento general del puesto, complemento común entre los 45.000 funcionarios de Justicia de todo el territorio nacional, y sobre el cual el Ministerio de Justicia tiene poder de modificar y regular, no así las comunidades autónomas.
Respecto a nuestras reivindicaciones planteadas en la huelga, manifestó hasta en dos ocasiones, contradiciéndose con lo dicho anteriormente y asumiendo con sus palabras la competencia del Ministerio para solucionar el conflicto y para subir el complemento general del puesto, lo siguiente: "...yo espero, espero que la semana que viene podremos cerrar con los jueces, cuando acabemos con los jueces empezaremos con los Cuerpos Generales de la Administración de Justicia". Y más adelante dijo de nuevo: "...la semana que viene esperemos terminar con los jueces, dejadnos terminar la campaña electoral un poquito tranquilos y después ya arreglaremos lo vuestro".
Asimismo reconoció que no se puede subir a un solo Cuerpo, el de los LAJ, sin hacerlo con el resto de colectivos, Jueces, Fiscales, Médicos Forenses, Cuerpos Generales y Especiales.
Al final de la charla con el secretario de Estado se le hizo entrega de la carta dirigida a la ministra y se comprometió a hacérsela llegar, puesto que a los delegados allí desplazados se les prohibió acercarse a ella, recordándole que el atasco en Justicia fundamentalmente lo han provocado los LAJ con su conflicto y que un Ministerio de Justicia clasista, que solo mira por los de arriba, nos ha forzado a la huelga.
Esperamos que las palabras del secretario de Estado se materialicen lo antes posible y nos llamen para la negociación. Ellos saben que tarde o temprano van a tener que reunirse con nosotros, pues empieza a hacer mella la presión de la huelga, las movilizaciones y la repercusión mediática de ambas.