Entre los indicadores que estudia el informe para detectar el efecto de la crisis en los órganos judiciales se encuentra el movimiento de asuntos concursales, tanto los presentados en el Juzgado de lo Mercantil de Santander, que responden a empresas, como los que se registran en los Juzgados de Primera Instancia de la región, que son los que se refieren a particulares.
Durante el tercer trimestre de 2018 se presentaron en Cantabria un total de trece concursos -12 de empresas y 1 de persona física-, frente a ocho de 2017, de modo que se dispararon un 62,5%, si bien este aumento responde a los tramitados en el Juzgado de lo Mercantil, que pasaron de seis en el tercer trimestre de 2017 a doce en el de 2018, mientras que la media nacional registró una subida del 18,7%.
Por el contrario, solo un particular se acogió a la fórmula del concurso de acreedores para gestionar sus deudas, una persona menos que el pasado año.
Además, el Juzgado de lo Mercantil de Santander declaró nueve concursos; en un procedimiento se abrió la fase de convenio y en cuatro se fue a la liquidación.