Casi la mitad de los hombres que fueron condenados por sentencia firme en España en 2015, concretamente un 48,4%, tenían entre 18 y 25 años, según un estudio del Instituto Nacional de Estadística (INE), que también revela que el número de mujeres condenadas el año pasado se incrementó un 17,5%.
Según el informe del INE, el año pasado se impusieron un total de 617.696 penas dictadas en sentencias firmes por los juzgados y tribunales en jurisdicción penal, lo que supone un 0,3% más que en 2014.
En 2015 se impusieron un total de 152.937 penas de prisión, un 2,5% menos que el año anterior. Las penas privativas de libertad fueron más frecuentes para extranjeros, incluso la de prisión, que supusieron un 26,6% del total frente al 24,2% en el caso de los españoles.