La fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, ha remitido una circular a todas las fiscalías ante la entrada en vigor de la reforma del Código Penal para fijar las pautas para la persecución de los delitos leves. Entre otros puntos, establece los delitos sobre los que no se podrá instar el archivo pese a que la víctima no quiera seguir con el procedimiento, como la ocupación de viviendas o la violencia física y psíquica en el seno familiar.
Dichas pautas de actuación son necesarias debido a que una parte de las actuales infracciones de carácter leve queda despenalizada y a partir del 1 de julio serán sancionadas en la vía administrativa civil, mientras que el resto quedan incluídas en el Código Penal y asimiladas a las características del juicio de faltas.
La novedad que supone la introducción de principio de oportunidad reglada y la necesidad de determinar en cada caso si se trata o no de un delito leve, ha motivado la fijación de criterios mediante circular, con el fin de que los fiscales sepan cómo actuar en cada caso.
La circular, de 50 páginas, señala por ejemplo el modo de actuar de la acusación pública cuando existan delitos leves que afectan al patrimonio público o a bienes jurídicos personales.