De trece a tres empleados. Esa es la drástica reducción que sufre desde el pasado 24 de enero la plantilla del archivo judicial territorial de Málaga, lo que está produciendo retrasos en el servicio de préstamo y devolución de expedientes, mientras que el de transferencia desde los juzgados está paralizado.
STAJ ha denunciado que los pedidos se han alargado en el tiempo, puesto que antes se recibían en apenas un día, período que ha aumentado a nueve o diez días. Además, las solicitudes urgentes, que solían estar listas en quince o veinte minutos, ahora tardan entre tres y cuatro horas. Hay que tener en cuenta que por este archivo pasan de media al día 250 expedientes.
Además, el responsable de STAJ en Málaga, Juan Antonio Luque, ha comentado que el sistema informático que se venía usando, llamado Nova, ha dejado de estar operativo. Ello ha obligado a los actuales trabajadores a realizar de nuevo los impresos a mano, lo que representa "un deterioro enorme de la calidad del servicio que se venía prestando".